Una más salida de la mente de Marc Fernández. Después de “The Bandit”, “The Longest night”, “Peaks of the Sun” y “Backyard Ultra” aparece “Andòmita”. Todas ellas carreras con planteamientos que llevan la experiencia del trail un poco más allá.
MÁS, MÁS, MÁS…
Esta vez la idea es cruzar Catalunya desde las playas del sur hasta el Pirineo, concretamente hasta Sant Julià de Lòria, en Andorra, con cruce de frontera incluido.
Una cantidad desproporcionada de kilómetros – más de 400 – y un desnivel acorde – 19.000 – a realizar en 130 horas con cinco bases de vida en etapas de 65 a 110 kilómetros y que marcan los límites horarios en un recorrido basado en el uso del GPS.
Una prueba itinerante con una organización también itinerante que obliga al pequeño formato y en la que buena parte de los alrededor de 40 participantes (no todos se disponían a realizar el recorrido completo) son repetidores de las otras pruebas de Marc Fernández y su equipo.
Una suerte de excursión familiar de gran formato en la que las familias hacen las veces de asistencia y avituallamiento en cualquier punto de un recorrido con pasos obligados y en el que la confianza en la honestidad de los corredores es la base: las posibilidades de controlar posibles trampas son, hasta cierto punto, pocas, a pesar de lo cual y de momento, tampoco es el problema dado el espíritu que aglutina a estos condicionales de lo que podríamos llamar “trail alternativo”.
Una estructura minimalista y parte de la inscripción destinada a una organización que trabaja con niños que han sufrido abusos marcan, una vez más, una filosofía organizativa que, por concepto, limita el planteamiento a carreras a realizar casi entre amigos: las necesidades estructurales de una prueba de estas dimensiones para centenares de corredores serían brutales; algo que Marc Fernández parece tener claro.
Desde un punto de vista deportivo nada que no se sepa ya: sólo seis corredores fueron capaces de completar el titánico recorrido, un porcentaje alto para las pruebas que Marc Fernández suele proponer… Seis nombres que vale la pena mencionar: Francesc Martí (vencedor de una prueba que realizó prácticamente en solitario), Imanol Aleson, Óscar Plasín, Oriol Antolí, Jonathan Jurado y Félix Sánchez. La mayor parte de ellos con experiencia previa en las locuras de Fernández y, de buen seguro, con ganas de repetir.