Vemos porque hay luz… hasta que la luz desaparece. Y ahí es donde el saber hacer de PETZL va a ayudarnos. En el mundo del trail, la noche forma parte del juego, toda o parte, mucha o poca, pero incluso en carreras en las que no se espera la noche, un frontal en la mochila puede sacarnos de un apuro si las cosas se tuercen. Que levante la mano quien nunca ha echado en falta algo de luz…
HÁGASE LA LUZ
Y es que cuando las distancias empiezan a crecer o el día va siendo corto, es difícil plantearse actividades de trail running en las que no sea aconsejable, véase imprescindible, disponer de un sistema de iluminación fiable.
Pero ¿Qué características debe tener un frontal? ¿Necesito lo mismo para un ultra con toda la noche por delante – como en una Transgrancanaria que se acerca para muchos – que para una sesión tardía de entrenamiento en pleno enero? En PETZL, la marca pionera de la iluminación “manos libres” tienen claro que no. Por eso, más allá del omnipresente peso que en la gama PETZL va de los 390 gramos del DUO RL (que no es para correr) a los 26 gramos del e+LITE (un frontal de emergencia) pasando por los alrededor de 100 gramos de la mayoría de modelos óptimos para el trail running, hay otras muchas características a considerar cuando buscamos una lámpara para nuestra actividad.
POTENCIA
Aunque el peso es a menudo el primer factor a considerar, la potencia del frontal suele ser también decisoria. Calculada en lúmenes – la unidad que permite medir la luz emitida por una fuente – condiciona la distancia a la que puede llegar a iluminar nuestra lámpara, que se mide desde la fuente emisora hasta el punto en que ese flujo luminoso es de un cuarto de lumen por metro cuadrado: la luz se dispersa en el espacio y pierde intensidad a medida que se aleja de la fuente.

Y eso, en definitiva, es parte importante de lo que se busca en un frontal para actividades al aire libre: capacidad de iluminación, pero ¿Más es mejor? No necesariamente, la gama PETZL de frontales idóneos para correr, dispone de diversos modelos que cubren desde los 200 metros del NAO RL (1.500 lúmenes) a los 15 metros del e+Lite (40 lúmenes).
A partir de aquí, es evidente que no necesitamos el mismo frontal para ir en bici que para correr: tal vez no necesitemos una excesiva “cantidad de luz” para movernos a pie por la noche, modelos como la NAO RL o la SWIFT RL, con un alcance de 200 y 155 metros respectivamente (1.500 y 1.100 lúmenes) serán más que de sobra para cualquiera, entendiendo que otros modelos menos performantes en este aspecto, como un IKO CORE (100 metros 500 lúmenes) o un ACTIK CORE (115 metros 600 lúmenes) nos recompensarán con más horas de actividad, un ahorro considerable de peso y son igualmente efectivos a la hora de iluminar un amplio espacio.
Hay que considerar, además, que en carreras con secciones nocturnas es habitual el uso de cintas con reflectantes, que responderán a la luz emitida por el frontal mucho más allá del alcance teórico del modelo utilizado.

Pero no todo queda en la potencia cuando evaluamos las características de un haz de luz que puede, por ejemplo, ser reactivo (“REACTIVE LIGHTNING” ) y variar automáticamente la intensidad en función de si estamos iluminando un objeto cercano o especialmente luminoso (una hoja de papel o una baliza reflectante, por ejemplo), algo que además optimizará el consumo de energía. Así mismo, la posibilidad de que el haz de luz sea más o menos amplio o focalizado (“MIXED
”) es una característica genérica de los frontales PETZL de la gama PERFORMANCE o ADVANCED, que agrupan los frontales más adecuados a lo que nosotros necesitamos.
AUTONOMÍA y RESERVA DE ILUMINACIÓN
Pero es obvio que más potencia requerirá más energía, y que esto tendrá una incidencia directa en las horas de uso efectivo de la linterna, que en el caso de los modelos de PETZL es de alrededor de 100 horas en la mayoría de los modelos que, además, garantizan una reserva (“RESERVE ”) de luz mínima (de entre 2 y 20 horas dependiendo del tipo de iluminación y fuente de alimentación) que permite andar y, por lo menos, salir del apuro.

La posibilidad de disponer de baterías de recambio (obligatorias en muchas carreras) o incluso contemplar la posibilidad de que esas baterías sean mixtas y se puedan alternar (“HYBRID CONCEPT”) las habituales de litio con cargador con las clásicas AAA, fáciles de encontrar en todas partes del mundo, no deja de ser un valor añadido a tener en cuenta del que disponen todos los modelos de la gama ADVANCED (IKO CORE, IKO, ACTIK CORE, ACTIK y ARIA 2 RGB) y DISCOVER (TIKKA, TIKKA CORE, TIKKINA, ARIA 1)
Y ADEMAS…
Más allá de las funciones básicas a las que está destinado, a veces son los pequeños (y no tan pequeños) detalles los que marcan la diferencia, como el nivel de estanqueidad del frontal, algo imprescindible cuando de trail running (o cualquier actividad al aire libre) se trata. Todos los modelos de PETZL cumplen, como mínimo, la norma IPX4, que garantiza el funcionamiento bajo la lluvia. A partir de aquí, algunos modelos cumplen normas más exigentes (IPX7 o IP67) que permiten incluso sumergir hasta 1 metro durante 30 minutos el frontal, entre ellos el pequeño modelo de emergencia e+LITE.
La posibilidad de bloquear el interruptor(“LOCK-UNLOCK”) es un detalle importante que, en muchas ocasiones evitará que la lámpara se encienda accidentalmente en la mochila consumiendo una batería que probablemente más tarde necesitaremos.

Sin olvidar la adaptabilidad del frontal que, sin presionar demasiado, debe quedar bien fijado a nuestra cabeza, con una cinta que tiene elementos reflectantes (“REFLECTIVE COMPONENT”) en modelos como NAO RL, SWIFT RL, IKO CORE, IKO y ACTIK CORE y de la que podemos encontrar recambios en la práctica totalidad de modelos de PETZL cuando el uso deteriora sus propiedades.
Nadie duda que la lámpara frontal es uno de los elementos clave para la práctica del trail running, tanto cuando prevemos actividad nocturna como cuando, en principio, no se la espera: el azar depara a menudo sorpresas… Un dispositivo fiable no nos llevará a meta por sí solo, pero lo que es seguro, es que un dispositivo que no lo sea fácilmente arruinará nuestras posibilidades de cruzarla.
PETZL está ahí para poner luz a la oscuridad.
Texto: Redacción
Fotografía: Quim Farrero / PETZL